A menudo tendemos a juzgarnos cuando comentemos un error o actuamos de una manera que consideramos inapropiada, pero ¿Cuántas veces nos hemos preguntado por qué con el único objetivo de saber más de nosotros/as?
La psique del ser humano es maravillosa, cuenta con miles de matices y recovecos, somos seres extremadamente interesantes, ¿por qué entonces solo nos interesamos por nosotros/as cuándo queremos recriminarnos algo?
«La curiosa paradoja es que cuando me acepto tal como soy, entonces puedo cambiar». Carl Rogers
Uno de los objetivos de la terapia, y en mi opinión el más interesante y enriquecedor, es éste: él autoconocimiento. Dejar a un lado el juicio y permitirnos un espacio en el que observarnos e interesarnos por nosotros/as, conocernos y aceptarnos.
Además, gracias a ese conocimiento podremos desarrollarnos personalmente, partiendo de nuestras necesidades y objetivos y sin querer cambiar lo que somos, sino potenciándolo.
«Allí donde el agua alcanza su mayor profundidad, se mantiene con más calma.» William Shakespeare